martes, 23 de marzo de 2010

Accidentes

El tema de estos textos surgió a partir de que tomamos conciencia de la importancia de prestar atención para evitar sufrir desgracias. Rubén no eligió la bici adecuada. Juanjo incorpora al final una historia de superación a base de esfuerzo, constancia, voluntad, quizá incluso tozudez o amor propio. Antonio Martín nos enseña que Noche Vieja no es el mejor momento para acudir a un hospital.

1 comentario:

  1. Yo he tenido muchos accidentes, pero el más importante fue cuando me caí de la bici, me rajé la barbilla y me echaron tres puntos. Aquello fue terrorífico porque allí estaba mi primo que por poco vomita, menos mal que no.
    Cuando tenía cinco años mi padre me enseñó a poner las manos, para que cuando me cayera no me diera en la cara. Cuando tenía cuatro años, aprendí a montar en bici. Un día que el bar estaba cerrado cogí la bici, le quité las ruedas y me caí 15 veces, pero no me rendía. A las 10 de la noche, cuando mi padre regresó del trabajo, ya sabía montar.
    (Juan José)

    ResponderEliminar